jueves, 27 de enero de 2011

Ahora

Sepultado por el alud del presente.

Desorientado, escarbo y escarbo...

alejándome de la superficie.

miércoles, 19 de enero de 2011

Sueños

En mi vida jamás había recordado mis sueños...

Hoy sin embargo, estabais los tres, cenando en algún lugar familiar que no logré reconocer. Conversábamos tranquilamente de las emociones de estos últimos tiempos, cada uno a su manera, en su terreno, rebosantes de vida, con los proyectos que nos ocupan y que nos convierten en felices conscientes; bah, quizas "felices" ya no sea un buen adjetivo: nos falta ya mucha inocencia para regalarnos ese calificativo. Quizás estusiasmados, quizás con todo nuestro afán en que las cosas salgan bien, quizás conocedores de que lo que nos traemos entre manos sólo puede salir bien ¡en ello nos va la vida! ¡Ay, sí, la vida! Esa cosa abstracta que sólo se vuelve carnosa, verdadera, indudable con las mejores y las peores noticias...

Mi parte como sabéis en este pedazo de presente tiene que ver con mi gran viaje. Tiene que ver con esta bicicleta y esta compañía. Tiene mucho que ver con los recuerdos en los que aparecemos juntos. Al contrario que uno de vosotros yo no "escribo para recordar lo que no he vivido" sino que escribo para recordar todo lo que vivimos, todos nuestros tropiezos, nuestras ternuras y nuestras osadías.

Ahora, en este momento me entero de que a nuestro amigo, que era igual que nosotros, ya sólo le queda el pasado. Me entero de que nadie sabe la causa de la muerte súbita y de que llevaba unos días cansado. Me quedo en silencio, me acuerdo de él y pienso que me gustaría estar allí, con vosotros. Como no es posible, sólo me quedó soñarlo.

Lo mismo nos pasará para siempre con P. Por eso, con la mentalidad de aquél niño de cuatro años, pienso y siento: como no va a ser posible volver a verte, te soñaremos.

lunes, 17 de enero de 2011

T.S. Eliot ya contó hace más de 60 años "cosas" de la época actual

" En la época actual, en que los hombres parecen más inclinados que nunca a confundir sabiduría con conocimiento y conocimiento con información, y a tratar de resolver problemas vitales en términos de ingeniería, está naciendo una nueva especie de provincianismo, que quizá merezca un nombre nuevo. No es un provincianismo espacial sino temporal, un provincianismo cuya historia es la mera crónica de las invenciones humanas que sirvieron en su momento y fueron deshechadas, un provincianismo para el cual el mundo es propiedad exclusivo de los vivos, sin participación alguna de los muertos. El peligro de esta clase de provincianismo es que todos, todos los pueblos de la tierra podemos ser juntos provincianos; y a quienes no se contentan con serlo, sólo les queda convertirse en ermitaños"

Sobre la poesía y los poetas
T.S. Eliot 1944.