jueves, 17 de noviembre de 2011

Multiculturalidad

De little Portugal a Cabbagetown. De Koreatown a Greektown. De Gerrard India Bazar al barrio de Roncesvalles donde asienta Little Poland. De Little Italy a Chinatown east. ¡Viva la multiculturalidad! Que viva sí pero...

- Si en Little Greek todos fueran multiculturales no habría restaurantes griegos. O los habría en igual número que los restaurantes eritreos.
- Si en Little Portugal todos fueran multiculturales, las señoras no vestirían traje de paño negro y mi pescadero de cabecera cambiaría el negocio por un bar de deportes.
- Si en Koreatown todos fueran multiculturales se impondría el alfabeto latino para que todos entendieran todo.

La multiculturalidad es asimétrica. Es la consecuencia de una convergencia entre dos grupos de personas: los desarraigados con dinero y los arraigados -en este caso- lejos de su patria. Sólo el esfuerzo de conservación de la entidad colectiva de los segundos permite mantener la atmósfera propia de su cultura. Solo su empecinamiento en no ser multiculturales permite que emerja el concepto de multiculturalidad. Los que viajamos sin creencias, sin folklores, sin miserias seculares en la mochila disfrutamos del mosaico de realidades, abrazamos la fe de la multiculturalidad y al miso tiempo la socavamos con nuestra ausencia de compromiso.

Lo pienso, lo repienso y no encuentro la solución a esta ecuación "Cuanto más multiculturales seamos, menos multiculturales seremos"

2 comentarios:

  1. una sociedad o una ciudad pueden ser multikulti como dicen por aquí, pero una persona "multikulti" tiene altísimas posibilidades de ser un verdadero gillipollas!!!.
    Así que mejor no lo intentamos....

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