viernes, 15 de abril de 2011

... me levanto con el día y me pongo a caminar...

No le gustan las cortinas ni se pone antifaz para dormir, solo lo usa de vez en cuando por el día para ocultarse lo que ya conoce y pasar rápido por ese aro. Por eso se levanta con el Sol...ahora en Primavera es temprano, y repleto de energía. Si el Sol brilla de verdad es imposible no estar contento, y a esas horas suele hacerlo... un rato antes de que despierten los malos humos de las gentes y enturbien la atmósfera.

Así que sonríe... está contento con las nimiedades de su rutina en la reducida burbuja de estos últimos tiempos. Y emocionado porque dentro de poco la rutina nunca más volverá a serlo y tensará el arco y volará la flecha y con ella muchas de sus ilusiones llegarán más allá de su alcance.

Reflexiona en estos últimos días de tranquilidad y dormir al tempo de los pollos; En su exilio voluntario se trajo lo más importante, eso que te llevarías tú a la isla desierta, pero dejó...por gusto, valentía o ignorancia, todo lo demás atrás. Alejó a sus amigos, olvido los libros y la actualidad política, renunció casi a las palabras para empezar desde cero a balbucear, enterró la sardina,el choco y el boquerón frito. Lo hizo en cierto modo como ofrenda, como tributo o previo pago en pos de una búsqueda genuina, la de aquello verdaderamente importante. Y parece que lo ha encontrado; es lo mismo con lo que partió de viaje.

Va a tener razón el simplón de Coehlo y el tesoro está debajo de la higuera.
Así que después de tanta mudanza, tanto cambio por sistema, no puede evitar sentirse muy.
Muy tonto o muy listo y muy valiente, ¿muy estúpido? Se ríe recordando a la inminente abuela parafrasear a Aristóteles sin parar ...“el punto medio, hay que estar en el punto medio...“. Nunca estuvo de acuerdo, pero sí queda residual cierta aprensión por los „muy“.
Lo que es sin duda es muy afortunado.

Encontró el maná bendito y ahora sólo le falta compartirlo porque incluso el maná bendito sabe mejor si se alterna con cervecitas callejeras y aceitunas baratas en salmuera. A veces piensa que piensa demasiado y le cuesta reconocer que se siente simplemente lejos.

Lejos cerca?.La vida no es geométrica, como aquello de los Ríos...

Lo dijo aquel profeta bastardo
„las matemáticas no fallan...
...pero tampoco aman“

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